Contar con un departamento dedicado a la grabación y producción de vídeo en una empresa no siempre es posible. Y aunque lo sea, tampoco siempre es rentable. O la empresa se dedica sobre todo a temas relacionados con la producción multimedia, o es inevitable comenzar a hacer números pronto para ver si mantener la producción de vídeo de manera interna. Sobre todo si los números no cuadran demasiado o se reducen los ingresos. También si el sector al que pertenece la empresa no saca mucho partido al mundo audiovisual.
Puede que si los miembros del departamento no se dedican exclusivamente a la creación de vídeos resulte interesante. Pero si no es el caso de la tuya, llegará un momento en el que tengas que valorar si merece la pena o no subcontratar el departamento de vídeo. Pero para ello tienes que saber lo que implica, y también sus ventajas. Aquí las tienes.
Cuando subcontratas un departamento, lo que haces es dejar de realizar de manera interna las tareas que se hacían en dicho departamento. En su lugar, comenzarás a trabajar con proveedores externos que se dedican exclusivamente a ello.
En este caso puedes hacerlo tanto con autónomos que trabajan como editores y creadores de vídeo freelance, como a estudios de vídeo y pequeñas empresas dedicadas al mundo de la creación multimedia. Si optas por esta modalidad, cada vez que necesites grabar, producir o editar un vídeo tendrás que contratar a quien quieras que se encargue de ello.
Al principio puede que te cueste un poco encontrar a una empresa o profesional con el que trabajes a gusto. Es algo muy normal. Por eso lo más recomendable es probar con tres o cuatro empresas o profesionales hasta dar con uno o dos con los que estés satisfecho. En más recomendable encontrar dos, porque puede que en algún momento necesites un vídeo y el profesional o la empresa a quien se lo encargues no pueda asumir el trabajo porque estén ya muy ocupados. En estos casos, contar con una empresa o profesional de confianza de respaldo te puede sacar de un buen apuro.
Después de seleccionar tus empresas y profesionales preferidos para subcontratar el departamento de vídeo, y de pasar un tiempo trabajando con ellos, verás que desaparecen todas las trabas que pudieras tener al principio. Sobre todo, si la comunicación entre ambas partes es fluida, será como tener un departamento de tu empresa, pero fuera de ella, que siempre está cuando le necesitas.
Como suele pasar en estos casos, la primera ventaja de subcontratar el departamento de vídeo es económica. No contar con un equipo de trabajo dedicado a multimedia en tu empresa hará que ahorres en nóminas y seguros sociales. La segunda es que racionalizarás la producción de vídeos. En vez de crear un número excesivo, solo encargarás los que realmente necesitas, porque tendrás que pagar por cada uno.
Además, las tareas de las distintas fases de creación de un vídeo a nivel interno puede dar muchos quebraderos de cabeza. Al ser una parte de tu compañía, de alguna manera te tocará implicarte en ello. También puede que tengas que enfrentarte a peticiones de recursos de todo tipo. Y cada dos por tres, reuniones a ver qué avances se han hecho.
En definitiva: da quebraderos de cabeza. Al subcontratar el departamento de vídeo te puedes olvidar de ellos. Lo único que tendrás que hacer es tener dos o tres reuniones con quien se encargue de todo, generalmente una empresa dedicada a la grabación y producción de vídeo, como FlitCut. Todo ventajas y muy pocos inconvenientes ¿no crees? Anímate a externalizar la creación de los vídeos de tu empresa y no te arrepentirás.